502.2

El ministro del evangelio en la Iglesia del Nazareno debe tener paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo y ser enteramente santificado por el bautismo con o la llenura del Espíritu Santo. El ministro debe tener un profundo amor por los pecadores, creyendo que están pereciendo, y un llamado a proclamar la salvación.