122.1

Los pastores y las congregaciones deberán procurar
una clara comprensión de sus expectativas mutuas y resolver las diferencias siguiendo con sinceridad los principios bíblicos, incluyendo los que están Mateo 18:15–20 y Gálatas 6:1–5. En un espíritu de cooperación y reconciliación dentro de la iglesia:

  1. Los miembros en forma individual o colectiva serán animados a resolver sus diferencias dialogando frente a frente con el pastor o discretamente con un miembro de la junta de la iglesia. Los miembros de la junta de la iglesia en forma individual o colectiva buscarán resolver sus diferencias dialogando frente a frente con el pastor.
  2. Si cualquiera de los diálogos previos no conducen a una solución, la persona que se sienta afectada, deberá buscar la ayuda de uno o dos miembros espiritualmente maduros de la congregación o de la junta de la iglesia para resolver sus diferencias.
  3. Las personas que participaron en estos esfuerzos previos de solución, presentarán sus diferencias al pleno de la junta de la iglesia sólo después de que éstos hayan fallado en el diálogo frente a frente. Si así sucede, la junta de la iglesia buscará resolver las diferencias en un espíritu de amor, aceptación y perdón, y de acuerdo a la disciplina de la iglesia. (123–126.2, 129.1)